jueves, 30 de octubre de 2014

Pienso demasiado

Me gustaría decir que estoy contento y feliz de hasta donde he llegado, y en cierto modo no estoy descontento, todo lo contrario, me siento feliz con muchas de las cosas que he logrado, pero no obstante siempre surge la duda de cómo habrían sido las cosas si hubiese escogido otro camino y hubiese hecho lo que quería y no lo que me parecía en ese momento, siempre surgen arrepentimientos, pesares internos, espinitas que nunca podrán ser arrancadas por haber hecho o no haber hecho algo. Es complicado explicar un sentimiento tan profundo como es la mentalidad de un ser joven y muchas veces indeciso (como todo ser humano). Soy consciente de que no encajo para muchos individuos de los que tengo a mi alrededor, y asumo y entiendo que somos completamente antagónicos e incompatibles, pero no puedo evitar sentir frustración al ver que me siento incomprendido y que no puedo hacer nada por evitarlo, siento que el tiempo se me escapa y no puedo hacer nada por evitarlo, siento que voy cumpliendo años y hay puertas que se cierran, sé que alguna se abrirá. A veces me siento alegre y lleno de fuerzas y otras tantas me siento pequeño, como una hormiguita que busca su hormiguero y  que cuando lo alcanza lo ve pequeño, negro y de difícil acceso.


Nunca pensé que pudiese sentirme tan vacío a veces y tan frustrado, incómodo conmigo mismo, impotente e infeliz, a pesar de todo, teniendo mucha gente y a la vez no teniendo a nadie, y aunque tenga apoyos y refuerzos que a veces que me hagan olvidar lo malo (y recordar lo bueno) sé que mi destino está todavía hecho una madeja muy liada, y no encuentro la claridad que necesito, me veo dentro de un sendero abrupto y lleno de obstáculos difíciles de  eludir, me encuentro tropezando una y otra vez, y me levanto pero sigo en el mismo sitio, y la diferencia entre yo y gran parte del mundo es que YO no me conformo con caer y volver a levantarme como ELLOS, yo necesito levantarme y correr hasta llegar a mi meta final, donde me esperan nuevos senderos limpios por donde caminar y ver frutos, los frutos de mi esfuerzo...

Aún queda mucho por recorrer, el camino es duro y me cuesta, necesito respirar, y necesito llegar por algún atajo a alguna parte donde se pueda empezar a deshacer la madeja....


Broken Wings....

Mientras escribo esta entrada no dejo de pensar en todas las cosas que una vez pasaron por mi cabeza y lo ilusionado que alguna vez estuve: encontrar pareja, llegar lejos con mi carrera, encontrar un trabajo, aprender idiomas, ser una persona económicamente independiente y autónoma... Ahora veo que muchas de ellas eran ilusiones que no dejan de ser muy difíciles de conseguir, algunas veces en mi vida han sucedido cosas que me han hecho sentir libre, y otras tantas me han hecho volver a la tierra y ver que sigo con las alas rotas y con los sueños sin cumplir, a pesar de que siempre aparezcan nuevas ilusiones y proyectos, y a pesar de que sepas que los amigos te brindan su apoyo y te quieran, siempre hay una razón para sentirse inseguro y dudar, nunca estamos contentos con todo lo que nos aparece delante, pareciera que se nos viene el mundo encima y que no podemos terminar de despegar y despejar la incógnita. Rara vez encuentro la paz soñada entre las paredes de una casa que me vio nacer y crecer, pero se hace complejo el intentar no pensar en cómo podría volar hacia un destino diferente y remoto, donde nadie me perturbase y pudiese dar rienda suelta a  mis ilusiones.

No creo que sea raro el pensar en que a veces nos creemos dioses, sabedores de todo y criticamos al vulgo sin pensar y sin tener en cuenta la realidad de las cosas y de las distintas personas, no me parece justo ni sano, pero me hace humano plantearme todos estos dilemas e interrogantes que no cesan...

¿Por qué yo no? ¿Por qué yo sí? ¿Por qué no sabré reaccionar antes? ¿Por qué le ha tocado a ése/ésa y a mi no? Nunca lo sabré, simplemente tengo que acatar mi destino ser consecuente con la realidad que se me presente, pero creo que siempre es bueno cuestionar las cosas, siendo consciente de que hay realidades incuestionables.

No queda más que decir, puesto que últimamente la incertidumbre y la desesperanza me invaden y hacen que se oscurezca mi razón. Ojalá pudiera parar el tiempo y cambiar ciertas cosas, para saber rectificar y corregir. Ahora ya nada hay salvo una poca de esperanza que espera...